A quién no le ha pasado que al no tener todos los ingredientes necesarios para preparar sus recetas, ha debido ingeniárselas para reemplazarlas por otros. Pues… a mí me ha pasado varias veces; es así como aprendí a preparar este delicioso pan, casero y sin levadura.
En casa, ya extrañaban comer panecitos frescos y ya que habíamos decidido dejar de comprarlos en los supermercados (debido a la crisis de salud actual), se me ocurrió aprender a prepararlos en casa; sin embargo, no tenía todos los ingredientes, como la levadura por ejemplo. Así que decidí adaptar la receta del pan irlandés tradicional. Debo decir que no he intentado preparar este pan con la receta original, ya que no tengo todos los ingredientes, así que te dejaré aquí, la que he venido preparando estas semanas.
Ingredientes (Para 3 panecitos largos)
Preparación
Para formar el suero, verteremos la leche en un recipiente y añadiremos el zumo de 1 limón. Dejar reposar durante 20 minutos y agregar la vainilla.
Depositar la harina en un bowl, si prefieres puedes tamizarla usando un colador. Luego, incorporar la sal, el azúcar y el polvo de hornear o el bicarbonato de sodio. Remover todo.
Incorporar el suero a la harina, poco a poco, hasta obtener una mezcla homogenea. Finalmente, agregar las pasas y las semillas de Chía y volver a remover.
Precalentar el horno a 180°C. durante 15 minutos.
Mientras el horno se calienta, tomar un poco de la harina adicional y espolvorear la superficie en la que se amasarán los panes.
Colocar un papel de aluminio sobre la bandeja que se llevará al horno. Luego untar mantequilla o aceite de oliva sobre tus manos y sobre el papel de aluminio.
Separar la mezcla en tres partes iguales y amasar cada una de ellas, dándoles forma de mini baguettes, pero más anchos y pequeños.
Para adornar, puedes usar las semillas de ajonjolí o los dátiles trozados. (Si no tienes estos ingredientes, debes omitir este paso). También puedes hacer líneas o trazos sobre la superficie, similar a las de la imagen que se muestra arriba.
Colocar los panes sobre el papel de aluminio y llevar la bandeja al horno. Si quieres darles un toque rustico, puedes espolvorearles un poco de harina encima.
Finalmente, déjalos horneando durante 20 – 25 minutos, a una temperatura de 180°C.
Mini consejos:
Antes de amasar los panes, puedes espolvorearte un poco de harina sobre las manos enmantequilladas.